MARINALEDA,ANDALUCES LEVANTAOS de Juan Manuel Sanchez Gordillo

Por una de esas gratas casualidades ( y causalidades ) de la vida,encontré este libro entre las estanterías de la recién inaugurada Biblioteca de mi pueblo,allá por el año 86 u 87...Me llamó la atención su portada de papel de estraza,su tacto casi lijoso y la atrayente asociación de las palabras "Sánchez gordillo y Marinaleda".Recuerdo que había dos ejemplares y que ambos olían aún a imprenta mala.
De Marinaleda había oído hablar desde muy pequeñito...Era el pueblo donde los jornaleros ocupaban las tierras de los señoritos y Sanchez Gordillo era el alcalde de ese pueblo por aquel entonces y sigue siéndolo todavía por hoy.
Escuchar en las cassettes de mi padre las letras del grupo de sevillanas reivindicativas"Gente del pueblo" me ofrecían esbozos del logro de aquellos andaluces que pedían tierra y trabajo y que fueron ejemplo de honestidad y lucha obrera;Pero fué al adentrarme en las páginas de este libro donde empezó a cobrar forma algo mucho mas concreto llamado unión,ideal,justicia....Descubrí que la belleza de espíritu no está en la ropa que nos viste ni en el automóvil que nos lleva,no está en las joyas ni en los títulos de nobleza,ni está en las palabras bonitas y rimbombantes...
Juan Manuel sanchez gordillo cuenta en esta narración de pantalón de pana el día a día de una huelga de hambre jornalera en la que todo un PUEBLO con mayúsculas participó, hasta el punto de que hubo que alimentar a la fuerza a ancianos,enfermos y niños cuya vida corría peligro porque seguían negándose a comer tras ser obligados a abandonar la protesta...
Cuenta Sanchez Gordillo como esa huelga de hambre contra el hambre ( para pedir dinero del "empleo comunitario") que duró 13 días y que fué llevada a cabo por mas de 700 personas, debilitaba los cuerpos pero afianzaba su sed de justicia...
Cuenta como fueron a brindarles su apoyo artistas y poetas comprometidos que se asustaban al verlos tan raquíticos...
Cuenta Juan Manuel como se abrían zanjas para llevar el agua a cada casa en los famosos "domingos rojos":todos le daban al pico sin cobrar ni una peseta...y así hicieron tambien practicamente todos los jardines y plazas del pueblo.
Cuenta como los niños de los jornaleros en huelga escribieron una carta al príncipe felipe y cuenta como se fue extendiendo la huelga por otros pueblos de Sevilla.
Que la honestidad del relatante y del relato están fuera de toda duda lo prueba el que es el único edil de los elegidos en las primeras elecciones democráticas celebradas tras la dictadura franquista que ha sido elegido ininterrumpidamente durante treinta y seis años.

Sobra decir que la lectura de este libro supuso para mi el encuentro con la dignidad jornalera de mi tierra y el nacimiento de un orgullo interior al que aún me aferro siempre que la vida viene del revés.Marinaleda, como aquellos fieros galos de la aldea de asterix que resistían siempre al invasor,sigue estando ahí,como un oasis en mitad del consumismo capitalista,como ejemplo de todo lo que las personas podemos llegar a ser ,como faro en esta sociedad oscurantista y tormentosa para con los derechos humanos,como ideal de tod@s l@s trabajador@s y sobre todas las cosas como voz que grita y planta cara a todas las injusticias de este mundo.
¡¡MARINALEDA!!