Este libro supuso para mi,un adentramiento en los mas oscuros recovecos de eso que llaman alma.Clara y concisamente (aunque situado en una esfera bastante elitista,eso si.) lo que houellebecq expone impúdicamente a la vista de todos es el precio de los sentimientos en la sociedad actual.Camuflado de utilidad o bien público el verdadero resorte que hace moverse al mundo sale a la luz...y este no es mas que el sexo.Todo es sexo en esta catarsis consumista que,como en el reino animal,se torna danza de reclamo entre hombres y mujeres que tratan hipócrita e ineficazmente de disfrazar sus psico-genéticas pasiones con moral,religiosidad y bonhomía...Todo ello es tan minuciosamente desmontado en esta novela,que causa terror mirarse al espejo.
sinopsis:
El vacío mas absoluto,pero confortable, se instala en la vida de un ingeniero informático que tras salir de una relación sentimental,empieza a trabajar en el ministerio de agricultura francés.Debido a sus muchos viajes y a las personas que por motivos de trabajo viajan con el,el personaje de houellebecq empieza la autopsia de la sociedad de supermercado en la que estamos inmersos.todo se compra y todo se vende;también el amor y por supuesto el sexo.El dinero es el Dios de todos y aunque cada persona tenga su propio caracter,este no es sino la pantomima de la sociedad en la que se ha creado.
Hablando mas en general,
ResponderEliminartodos estamos sometidos al envejecimiento y a la muerte.
Estas nociones de vejez y de muerte son insoportables para el
individuo; se desarrollan soberanas e incondicionales a
nuestra civilización, ocupan progresivamente el campo de la
conciencia, no dejan que en ella subsista nada más. Así, poco
a poco, se establece la certeza de que el mundo es limitado.
El mismo deseo desaparece; solo quedan la amargura, los
celos y el miedo. Sobre todo, queda la amargura; una
amargura inmensa, inconcebible. Ninguna civilización,
ninguna época han sido capaces de desarrollar en los
hombres tal cantidad de amargura. Desde este punto de vista,
vivimos tiempos sin precedentes. Si hubiera que resumir el
estado mental contemporáneo en una palabra yo elegiría, sin
dudarlo, amargura.
Al principio, ella no contestó. Reflexionó unos
segundos y luego me preguntó:
-¿Cuándo fue la última vez que tuvo relaciones
sexuales?
-Hace algo más de dos años.
-¡Ah! – exclamó ella casi con triunfo- ¡Ya lo ve! En
esas condiciones, ¿Cómo quiere amar la vida?...
-¿Querría hacer el amor conmigo?
Ella se quedó confusa, creo que incluso enrojeció un
poco. Tenia cuarenta años, estaba delgada y bastante
estropeada; pero esa mañana me parecía realmente
encantadora. Guardo un recuerdo muy dulce de ese
momento. Un poco a su pesar, sonreía; creí que iba a decir
que sí. Pero al final se dominó:
-Ese no es mi papel. Como psicóloga, mi papel es ayudarle a recuperar un estado en el que pueda poner en práctica estrategias de seducción que le permitan volver a tener relaciones normales con mujeres.
En las siguientes sesiones hizo que la sustituyera un colega.
Michel houellebeq-"ampliacion del campo de batalla"-