Recuerdo que leí este libro de un tirón,noctambuleándo y asomándome a la ventana de mi habitación,tras concluirlo, para ver amanecer un día de agosto.Además de la tristeza con que Benedetti,"el gran judío errante de la literatura contemporánea",tizna siempre a sus personajes cuando han amado,aman o se sienten dispuestos a amar ...en el libro hay una presencia invisible pero espiritualmente palpable cuya esencia aromatiza cada frase,cada circunstancia...
Particularmente,yo,siempre me identifiqué con el preso quizás por aquello de que al transcurrir (y suceder) la narración en una condiciones políticas que impregnan cada acto de sus protagonistas,es el hombre privado de su libertad el único que realmente es coherente consigo mismo al no estar contaminado por el trato habitual con sus seres queridos ( jueces y parte todos también del argumento)
El hombre preso es el único que mantiene viva la esperanza sin fisuras,desconocedor de que toda la realidad exterior ( la realidad externa a la prisión donde está encerrado) se desmorona.
Este libro es uno de los poemas (porque también es un poema ) mas tristes que he leído nunca y sin embargo...
..."con una esquina rota la primavera sirve."
Sinopsis:
"Santiago es un preso político durante la dictadura uruguaya que se aferra fielmente a sus ideales sin saber que,Graciela, su mujer le engaña con un amigo común de ambos,sintiéndose por eso culpables.El padre de Santiago,conocedor también de la infidelidad de su nuera,divaga moralmente al igual que ellos sobre la forma en que reaccionara su hijo cuando salga de prisión.Beatriz,la pequeña hija de Santiago y Graciela intenta comprender y explicar el mundo y la situación familiar desde su niñez.La familia de Santiago está exiliada en algún país de sudamérica,lo que hace que la trama se entrelace moralmente entre ellos mientras Santiago,que espera su liberación para reencontrarse con una familia rota es,gracias a su desconocimiento de esta problemática familiar ,el único que mantiene firmes sus valores."
Fue volver, y comencé a buscar esa esquina, pero rondaba el otoño...
ResponderEliminarEn el otoño uno también se puede sentir feliz como hace tiempo...
ResponderEliminar" Ahora, a tanta distancia, si quisiera ser descaradamente franco conmigo mismo, tal vez no sabría reconocer de qué me enamoré, o si realmente me enamoré alguna vez de esa mujer desmesuradamente mesurada. Me digo esto y de inmediato siento que soy injusto. Es claro que debo haberme enamorado. Sólo que no me acuerdo."
ResponderEliminar"primavera con una esquina rota"
-Mario Benedetti